Primer propósito: Aprender
las lecciones de la vida.
Tercer tema o curso: Explorando la mente.
Sólo explorando la mente podemos encontrar la
naturaleza de nuestro mundo interior, y es vital comprender nuestra mente para
darnos cuenta de lo ilusoria y subjetiva que es.
Lao-tse decía “tan pronto tengas una idea, ríete de
ella”, porque la realidad no es lo que pensamos. El mundo lo percibimos a
través de una ventana que está pintada de nuestras creencias, interpretaciones
y asociaciones. No vemos las cosas no como son, sino como nosotros somos.
El mismo cerebro que nos permite contemplar la
filosofía, resolver ecuaciones matemáticas y crear un poema, es el mismo que
genera un ruido estático que conocemos como divagación, el cual parece surgir
de manera aleatoria, emergiendo en nuestra conciencia.
Tal y como es ruido mental un fenómeno natural, no
tenemos problemas de los sueños que aparecen mientras estamos dormidos. Es por
esto que nuestra educación escolar no se enfoca en ayudar a luchar contra los
pensamientos aleatorios sino ir más allá de ellos en el presente, donde los
pensamientos no existen, solo la conciencia.
La liberación de nuestra mente no espera por un futuro
imaginado sino ocurre aquí y ahora.
Feliz semana.
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