El choque eléctrico paralizó el corazón de Schmidt quien quedó inconsciente y cayó al suelo.
Para su fortuna, el impacto de la caída reavivó su corazón, lo cual le salvó la vida.
“He examinado mi pasado –dijo una vez Mike Schmidt-, y me pregunto por qué ese niño tonto no murió en aquella ocasión. Probablemente por esta razón siempre he trabajado duro, pues no quiero pensar que desperdicié esa oportunidad”.
¡Feliz viernes y feliz fin de semana!
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