Tomado del libro: el filósofo interior
Ikeda dice: La mayoría de las numerosas dificultades que tenemos por delante son, en definitiva, problemas causados por el ser humano. Es razonable suponer, en tal caso, que si las personas cambian, podrán hallar solución a los aprietos que han provocado.
MARINOFF: Es interesante y también reconfortante oírle expresar este asunto en términos de voluntad, una facultad básica para cualquier aspiración humana de mejora que, sin embargo, últimamente se descuida bastante en la aldea global.
Ante todo debemos difundir dos ideas.
Primero, que el ejercicio de la voluntad es el factor determinante para dirigir la vida de todo ser humano y puede producir resultados trascendentales si se ejerce y mantiene en caminos virtuosos.
Segundo, que descuidar la voluntad conducirá a la apatía política así como a la atrofia social, ocasionando un vacío que demasiado a menudo se llena con ideologías, dogmas y burocracias, entre otros opresivos y entorpecedores mecanismos de control político y social.
En resumen, hay que ayudar a la gente a darse cuenta de que apenas utiliza su voluntad y que esta es un recurso inagotable que puede desarrollarse y aplicarse para resolver pacíficamente cualquier problema humano que se presente.
Nota personal: efectivamente una acción tomada pero no ejecutada correctamente no conduce a nada, hoy en día muchos actores políticos lo llaman diálogo. Pero, si eso no conduce a una acción concreta, si no hay voluntad de acción, ese diálogo no vale nada. Es igual para cualquier interacción entre personas: como una relación de pareja o de amistad.
Feliz inicio de semana.
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